Buscando información por internet acerca de él, he podido comprobar, siendo un poco benevolente, que no es demasiado visitado por los astrónomos aficionados. Siendo un poco más duro, se podría afirmar que es un perfecto desconocido.
Y viendo su situación en el cielo, resulta bastante comprensible que pase completamente desapercibido ante la categoría de sus vecinos, que no son otros que M47, a tan sólo 38’ y M46, algo más alejado, a 1,5º.
Carta generada con Cartes du Ciel |
Sin embargo, si conseguimos abstraernos de los protagonistas principales de la zona, podremos disfrutar de un cúmulo abierto realmente atractivo.
La noche del 19 de diciembre de 2014 no se presentaba especialmente buena para la observación astronómica. Me encontraba en unos cielos oscuros, viendo a simple vista un espectacular cielo de invierno, sin la presencia de la Luna, completamente despejado; pero con un gran inconveniente: el viento.
No era muy fuerte, comparándolo con lo que podemos llegar a sufrir cerca de la desembocadura del Ebro, pero sí soplaba de una forma continuada, provocando unas turbulencias atmosféricas muy marcadas. Las estrellas más brillantes las veía como pelotitas de golf, mientras que me resultaba especialmente complicado percibir las más débiles.
Pero son ya muchos meses sin poder sacar el telescopio en condiciones y hay que aprovechar hasta la más mínima oportunidad que se presente.
Así que decidí apuntar hacia NGC2423 a ver qué podía sacar de él.
Y este es el dibujo que hice con el SC de 235mm y el Hyperion Aspheric de 31mm después de un buen rato batallando con el viento:
Mucho me temo que no he sido capaz de captar con el dibujo lo que realmente es este cúmulo abierto. Si tenemos el acierto de llegar a un equilibrio entre el campo de visión, que sea generoso para abarcar en perspectiva el cúmulo en toda su extensión, y la abertura, para ser capaces de percibir hasta las estrellas más débiles de él; podremos disfrutar de una panorámica impresionante.
Pero como he comentado antes, la noche no es la más adecuada, y la turbulencia con la que tengo que lidiar me deja la sensación de no estar exprimiendo al máximo la serena belleza de NGC2423.
La gran mayoría de componentes las percibo de color blanco-azulado y me recuerdan a un hormiguero en medio de una febril actividad horas antes que se produzca un fuerte chaparrón. Realmente espectacular.
Una cosa hay que tener en cuenta. Son necesarios unos cielos oscuros para poder percibir correctamente el cúmulo, y aunque es asequible a aberturas no demasiado grandes, si es cierto que al estar compuesto por muchas estrellas débiles, nuestra percepción acerca de la belleza de NGC2423 puede variar dependiendo del número de componentes que podamos cazar con nuestro telescopio.
Para concluir una curiosidad. En la estrella TYC 5409-2156-1 (también conocida como NGC2423-3), perteneciente a NGC2423, se ha descubierto el exoplaneta NGC2423-3 b:
http://www.openexoplanetcatalogue.com/system.html?id=NGC%202423%203%20b
Oscar, cómo te vísite muchas veces, según lo explicas, es
ResponderEliminarimpresionante. Seguro que voy a ser aficionado de este hobby tan bello. Oscar, tú no explicas, tú prestas tu mente
y tus ojos al que lee tus explicaciones. Es cómo estar presente en el lugar que estás viendo con el telescopio la
belleza de las estrellas. Gracias. Felices Navidades. Y Prospero Año Nuevo. Sin Violencia ni guerras.
Gracias Pablo. Comparto plenamente tus deseos y espero que también pases una feliz Navidad y que 2015 nos venga lleno de felicidad, paz y amor.
EliminarSaludos.
Óscar
Hola Óscar, muchas felicidades en estas fiestas y que el próximo año 2015 sea mejor en todo.
ResponderEliminarUn abrazo
Gracias Paco. También te deseo unas felices Fiestas y un 2015 lleno de felicidad.
EliminarSaludos.
Óscar