domingo, 29 de diciembre de 2013

Resumen Fotográfico de 2013


Y como viene siendo habitual estos últimos tiempos, aquí está mi resumen fotográfico del año. No esperéis ver excelentes imágenes, la astrofotografía no es mi fuerte, tan sólo confío que transmitan un poco la ilusión con que las hago y que se tomen como un complemento a mis dibujos astronómicos y notas de campo.

Este 2013 lo recordaré como el año de los cometas. Empecé el año con el C/2011 L4 Panstarrs, un fantástico cometa que pude disfrutar a simple vista, con mis prismáticos y con mi cámara fotográfica justo a la puesta del Sol. Todo ello en medio de una convalecencia gripal, por lo que no tuve ocasión de observarlo con el telescopio, y es una lástima, pero el recuerdo de este visitante siempre me quedará gracias a las fotos que tomé.



El otro cometa que me impresionó fue el C/2013 R1 Lovejoy. Este sí que pude verlo con el telescopio, y siempre me quedará grabada la cara de fascinación que me quedó nada más poner el ojo en el ocular y ver un inmenso y brillante cometa cuya cola se extendía más allá del campo del ocular.



Y el tercero en discordia fue el C/2012 S1 ISON, el que tenía que ser el cometa del siglo y que acabó siendo un cometa que no pudo superar su perihelio, dejando con un palmo de narices a todos los astrónomos aficionados que desde el momento de su descubrimiento fuimos bombardeados por noticias sensacionalistas acerca del brillo que podría alcanzar. Y encima no tuve ocasión de verlo por el telescopio. Pero no me quejo, los días que pasé pendiente de su paso cerca de nuestro astro Rey, con la incertidumbre de si sobreviviría, consultando foros y webs especializadas, fueron realmente emocionantes.



Pero si tuviera que quedarme con un evento destacable, sin ningún tipo de duda elegiría el seguimiento de la Nova Delphini 2013. Su seguimiento resultó muy gratificante, por un lado por el brillo que alcanzó y por otro lado por coincidir su máximo esplendor durante los meses de verano. Una gran experiencia.



Desde que me compré el telescopio de 235mm mi afición por la observación de nebulosas planetarias aumentó. Este tipo de objetos presenta una muy variada tipología y poder ver detalles de muchas de ellas gracias a una generosa abertura hace que su observación llegue a convertirse en adictiva.

Como fiel reflejo a las noches con las que he disfrutado observando planetarias, una muestra de lo que nos pueden ofrecer son las fotografías de M97, M76, M57 y NGC7662.



Y una nebulosa que parece planetaria pero que no lo es, es NGC7635, la nebulosa de la Burbuja. En visual me resultó muy complicada percibirla y cuando decidí echarle una foto, tenía la secreta esperanza de cazarla con todas las de la ley, pero el resultado final fue una “media burbuja”. Con todo, disfruté mucho con ella.



No suelo fotografiar estrellas dobles, pero cuando observé la ADS13292 decidí hacer una excepción. Un sistema del que aparecen nada menos que 15 componentes en el WDS. Pasé un buen rato estrujándome la vista para comprobar cuántas componentes era capaz de cazar.



Y para estrella espectacular VY CMa, una hipergigante roja en Canis Major.



A lo largo del año la Luna también tuvo varias noches de gran protagonismo. De todas ellas recuerdo con especial cariño las observaciones de Petavius, Archimedes y la zona de los cráteres Stofler y Faraday. Ciertamente, la Luna nunca decepciona.



M52 es un cúmulo abierto al que le tengo un cariño especial, y este año, en agosto, quise intentar inmortalizarlo fotográficamente. No es nada del otro mundo, pero permite adivinar la magnificencia de este bonito enjambre estelar.



Este año he jubilado mi antigua Nikon D70S que ya tenía sus años y he comprado una Nikon D5100. Todo el mundo aconseja utilizar cámara Canon para astrofotografía, pero como yo ya vengo de Nikon desde los tiempos de la fotografía analógica, con Nikon continúo, aunque no descarto un cambio de marca si la afición a la astrofotografía sigue en aumento.

Con la nueva cámara quise probar a ver qué tal me salían algunas galaxias que en visual ya me dieron grandes satisfacciones. Así que ataqué con M51, M81, M 82 y NGC7331.









No me he prodigado demasiado en fotografía planetaria, pero Júpiter y Saturno han tenido sus noches de gloria… a pesar de las turbulencias atmosféricas.



Y para acabar una de las fotos del año de las que estoy más contento. Se trata de M15, un cúmulo globular que ya fotografié el año pasado y que creo he mejorado en 2013. Son pequeños avances, pero que me sirven para motivarme con la intención de seguir aprendiendo y mejorando mis fotografías.



Y hasta aquí este pequeño compendio fotográfico. Quiero aprovechar esta entrada para desear a todos los que leéis “La Orilla del Cosmos” que tengáis un 2014 lleno de felicidad y amor y que disfrutéis de grandes noches de observación durante todo el año.

sábado, 28 de diciembre de 2013

NGC7293 - Helix Nebula con el SC de 235mm - Planetaria en Aquarius

Revisando las carpetas donde guardo los dibujos de las observaciones que hago he encontrado uno de NGC7293, la Nebulosa de la Hélice, del 31 de agosto de 2013:


Ya había tenido ocasión de observarla con el SC de 127mm:
http://laorilladelcosmos.blogspot.com.es/2009/08/ngc7293-helix-nebula-planetaria-en.html

Fue una observación complicada, pero gratificante. Sin embargo, con el SC de 235mm fue sencillamente espectacular.

Y lo primero que tengo que decir es que  yo, que habitualmente no dejo en demasiada buena situación los filtros, en esta ocasión tengo que reconocer que tanto el UHC como el OIII me han permitido pasar de apenas intuir la nebulosa a verla de una manera que bien podría definir como de perfecta.

Para su observación utilicé el ocular Hyperion Aspheric de 31mm que es el que me proporciona menor aumento y un mayor campo con mi SC de 235mm, y a pesar de ello, NGC7293 se presenta enorme.

Teniendo la nebulosa perfectamente localizado, quito el filtro del ocular y me dedico a dibujar el campo estelar. Una vez he acabado, vuelo a enroscar el filtro UHC, adapto la vista a la oscuridad y empiezo a disfrutar de lleno de esta monumental planetaria.

Las zonas externas de la nebulosa, aun teniendo una forma entre redondeada y algo ovalada, presenta unos límites bastante irregulares. La zona interna no se ve tan marcada, ofreciendo un bonito y delicado contraste con la externa con lo que podemos observar una anularidad más que evidente.

Decido probar el filtro OIII y la nebulosa todavía resalta más y ofrece más detalles que con el UHC. No me canso de observarla.

A pesar de su espectacularidad, tengo que dejar claras dos cosas. A la hora de hacer el dibujo no he sido capaz de delimitar bien las diferentes zonas de la planetaria. Me baila la vista… Tal vez me hubiera hecho falta un poco más de paciencia, o experiencia, pero el caso es que detalles perfectamente definidos no he sabido reflejarlos en el dibujo.

Y la otra cosa es que las estrellas que aparecen en el dibujo superpuestas a la nebulosa, en realidad me desaparecen en cuanto pongo el filtro, con lo que la vista a la vez de estas estrellas y la nebulosa no me es posible. O unas o la otra.

De todas maneras NGC7293 desde unos cielos oscuros, un telescopio de abertura generosa y una noche con buena estabilidad atmosférica es como para estar deleitándonos con ella durante un buen rato.

viernes, 27 de diciembre de 2013

NGC772 - Galaxia en Aries

La constelación de Aries no es precisamente famosa por los objetos difusos de cielo profundo que podemos observar a través de nuestros telescopios, sin embargo en ella podemos encontrar a NGC772, una galaxia realmente interesante.

Carta generada con Cartes du Ciel

En la carta celeste de localización podemos ver que se encuentra a aproximadamente 1,5º de Mesarthim (Gamma Arietis), con lo que estamos de enhorabuena, ya que se trata de una estrella doble asequible y espectacular.

Ya pude observarla en su momento (http://laorilladelcosmos.blogspot.com.es/2009/11/gamma-arietis-mesarthim-y-1-arietis-un.html) y después de haberla descubierto, cualquier excusa es buena para volver a visitarla. La última medición que aparece en el WDS data de 2012 y en ella se apunta un ángulo de posición de 2º y una separación de 7,5”. Sus componentes prácticamente gemelas (mag. 4,5/4,6) presentan un resplandeciente color blanco.

La noche del 31 de octubre de 2013, observando desde cielos oscuros con muy buenas condiciones atmosféricas decidí ir a la caza de NGC772 y de camino no me olvidé de echar un vistazo a Mesarthim, esa vieja amiga que también aparece catalogada como STF180.

Me costó separarme de ella, pero al final me armé de valor y apunté hacia NGC772 pensando que Gamma Arietis le había puesto el listón muy alto.

Con el ocular de 25mm llego a la zona donde se encuentra la galaxia. Es un campo estelar pobre, pero en este caso resulta un punto a favor a la hora de poder disfrutar de NGC772. Al principio de la noche había hecho una primera intentona de observación, pero seguramente al no encontrarse demasiado elevada respecto al horizonte y que todavía no era noche cerrada lo tuve que dejar por inútil. En cambio, a las 23h 01m T.U., estando la constelación bien alta en el cielo, es poner el ojo en el ocular, adaptar un poco la vista y percibir en el acto una manchita difusa que identifico sin ninguna duda con NGC772.

Antes me había resultado esquiva, ahora se presenta bastante evidente. Noto un núcleo ovalado, pero sin ningún detalle. Lo único que consigo, con un poco de paciencia, moviendo un poco el tubo y utilizando visión lateral es intuir un cierto halo que envuelve tímidamente al núcleo, pero sólo eso, intuir.

Pienso en la belleza serena de Mesarthim, una estrella doble situada a 204 años luz de nuestro Sistema Solar cuyas componentes se encuentran situadas con una separación de al menos 500 UA y con un periodo orbital de unos 5.000 años; y pienso en la dificultad que entraña percibir estas pequeñas manchitas difusas, casi imperceptibles y el tamaño real que tienen (NGC772 se extiende a lo largo de 230.000 años luz, más o menos el doble que nuestra Vía Láctea) y la distancia a la que se encuentran (NGC772 a unos 115 millones de años luz). Hace falta una gran capacidad de abstracción e imaginación para intentar comprender en nuestras mentes lo que realmente estamos viendo.

Este es el dibujo que hice con el SC de 235mm y el ocular Nagler de 16mm:



NGC772 fue descubierta el 29 de noviembre de 1785 por William Herschel y se trata de una espiral barrada tipo Sb a la que vemos, desde nuestra perspectiva, inclinada unos 37º.

Leo también que está incluida en el catálogo de Halton Arp de galaxias peculiares con la entrada Arp 78. En esta relación galáctica está clasificada como una galaxia espiral con compañeras de alto brillo de superficie.

NGC772 se haya interactuando con varias galaxias compañeras, siendo NGC770 la mayor de ellas. Estas dos galaxias se encuentran separadas por unos 160.000 años luz de distancia, siendo NGC770, con unos 40.000 años luz de diámetro mucho más pequeña que NGC772. En visual están separadas por sólo 3’ 27”, pero el débil brillo de NGC770 no me permite percibirla.

El hecho de encontrarse interactuando con otras galaxias me ha llamado especialmente la atención, por lo que he ido a la web de Simbad y me he bajado una placa de NGC772:


Por lo que se ve, yo tan sólo he podido percibir el centro galáctico y el halo que lo envuelve, pero no ese peculiar brazo que se extiende de manera tan marcada. Una lástima, porque sería realmente espectacular. No descarto ocurra algo similar como con M51, que precisa de cielos oscuros y excelentes condiciones de observación para exprimirla al máximo, así que me dejo anotado revisitarla en cuando pueda.

Por cierto, la galaxia de la parte inferior es NGC770, otro reto pendiente.

jueves, 26 de diciembre de 2013

AR Cas - Sistema múltiple en Cassiopeia revisitado

El 9 de noviembre de 2007 estuve observando AR Cassiopeiae, un sistema realmente espectacular y apto para todo tipo de telescopios. La única condición es observarlo con unos cielos sin demasiada contaminación lumínica:

http://laorilladelcosmos.blogspot.com.es/2010/02/ar-cas-sistema-multiple-en-cassiopeia.html

Pues bien, me dejé anotado como tarea pendiente observarlo con un telescopio de mayor abertura para ver si era capaz de desdoblar las componentes que en su momento se me resistieron (A/B y C/D).

La noche del 2 de noviembre de 2013, aprovechando unos cielos oscuros y el SC de 235mm decidí echarle un vistazo. Previamente consulté el WDS y comprobé que había medidas actualizadas en el 2012, que son estas que aquí transcribo:


Y recuerdo la identificación que hice en su día de las componentes de este sistema:



Pero después de alinear el telescopio me di cuenta que a pesar de lo que pudiera parecer, la noche no iba a acompañarme. Las turbulencias atmosféricas no me permitían usar grandes aumentos, por lo que, como después comprobé, las componentes A/B y las C/D continuarían siendo un reto para una visita futura.

Con todo, este grupo de estrellas es tan atractivo que quise visitarlo de todas formas. Este es el dibujo que hice con mi ocular de 10mm que me proporcionaba unos 235x ya bastante extremos para la noche:



Curiosamente tan sólo pude ver 6 de las 8 componentes que aparecen en el listado del WDS, las mismas que en 2007 pude observar con el SC de 127mm, y la belleza que me transmitían era idéntica con ambos tubos. Gracias a lo espectacular que es AR Cas mostrando sólo las componentes más asequibles a todo tipo de abertura, de ninguna manera me sentí decepcionado por el hecho de no poder desdoblar los pares más complicados que la forman.

La estrella principal presenta un color blanco muy potente que unido a su magnitud de 4,9 hace que me fije en ella de manera exclusiva nada más poner el ojo en el ocular. La componente C también ofrece un color blanco, pero no tan evidente como A, y lo que me llama la atención es que a su lado veo una estrella más débil que no aparece referenciada en el WDS.

El resto de componentes de AR Cas, al ser tan débiles, no logran transmitir un color bien definido. Yo las veo de color azul/grisáceo.

Las componentes gemelas F y G merecen una mención aparte. Dos puntitos débiles, delicados, que ofrecen tal vez lo que me resulta más atractivo del conjunto.

Estoy un buen rato disfrutando de AR Cassiopeiae pensando que con grandes aumentos, más que un sistema múltiple, ofrece mejor un aspecto de asterismo muy peculiar. De hecho, me sorprendo pensando que he llegado a observar cúmulos abiertos en zonas con contaminación lumínica que tenían menos componentes que ella.

El 11 de noviembre de 2013 volví a visitarla con el SC de 127 y cuando acabé la observación hice el dibujo con el Photoshop:



Y recuperé una foto que hice a foco primario de mi SC de 235mm con la Nikon D5100 el 1 de noviembre de 2013. En ella, en la parte superior izquierda aparece otra bonita doble, la STF3022:



En definitiva, por un lado pasé un buen rato revisitando este sistema estelar, pero por otro me quedó el desencanto de no haber podido descubrir todos los secretos que esconde. De manera que la continúo dejando en la lista de objetos pendientes, a ver si otra noche con mejor estabilidad atmosférica pudo, por fin, disfrutar completamente de AR Cassiopeiae.

domingo, 22 de diciembre de 2013

IC2149 - Nebulosa planetaria en Auriga

IC2149, planetaria situada en la constelación de Auriga. Brilla con magnitud 10,7 y se extiende a lo largo de tan sólo 8,5”. Esto es todo lo que sabía de esta nebulosa planetaria cuando la noche del 2 de noviembre de 2013 me propuse echarle un vistazo para añadir una muesca más al listado de 80 planetarias propuestas por Diego González (https://sites.google.com/site/astrodgonzalez/80plnnb).

Empezando por el final, la conclusión a la que he llegado después de observarla con mi SC de 235mm es que esta no es una planetaria apta para gente impaciente.

Es muy pequeña. En noches de mala estabilidad atmosférica he visto estrellas más gordas que IC2149, y de hecho, cuando he localizado la zona donde se encuentra, no he sido capaz de diferenciarla del resto de estrellas que aparecen utilizando el ocular de 25mm. Aunque también hay que remarcar que el campo estelar es bastante pobre.

Más o menos la identifico, pero no me quedo absolutamente convencido que estoy ante la planetaria hasta que decido salir de dudas poniendo el filtro OIII al ocular Nagler de 16mm (146,88x). ¿Y cómo lo he confirmado?, pues porqué me han desaparecido casi todas las estrellas del campo excepto la planetaria, que en contraposición se apreciaba más marcada.

Pequeña, redondeada, sin ningún detalle.

En vista del éxito he decidido forzar los aumentos y he acabado dibujando lo que veía a través del ocular de 10mm (235x):



Estaba ya dando por concluida la observación cuando he ido a tachar de la lista de las 80 planetarias la IC2149 y he visto que la estrella central brilla con una escandalosa magnitud de 11,6, con lo que, en teoría, no debería tener problemas a la hora de percibirla.

He quitado el filtro y he vuelto a poner el ojo en el ocular. Con cierta desilusión no veo más que el redondel vaporoso de la planetaria. Entonces me he acordado de NGC6826, la “Blinking Planetary” en Cygnus y he empezado a con el experimento: he ido alternando la visión lateral con la mirada fija en la planetaria y ante mi sorpresa, o mejor dicho, gozo, compruebo que mirando de reojo veo que la nebulosa “desaparece” y queda tan sólo un puntito definido, y que cuando vuelvo a fijar la vista vuelve a aparecer la nebulosa.

Cuando he puesto por primera vez el ojo en el ocular no hubiera apostado ni un céntimo que esta diminuta y esquiva planetaria fuera capaz de darme más juego que el simple hecho de cazarla, sin embargo tengo que reconocer que he pasado un rato emocionante con IC2149, descubriendo poco a poco sus secretos.

Como decía al principio, es una planetaria no apta para gente impaciente, pero es asequible a telescopios pequeños/medianos. Eso sí, son imprescindibles unos cielos oscuros.

Pero la historia no concluye aquí. Buscando posteriormente más información acerca de esta nebulosa me encuentro con que fue descubierta por Williamina Paton Fleming en 1906. Nombre que me lleva a una época en la que las mujeres no estaban muy bien consideradas en el campo astronómico. Sin embargo, Williamina Fleming fue una pionera en el merecido reconocimiento del trabajo bien hecho independientemente del sexo de la persona que lo realiza. Después de muchos años de esfuerzo y buen hacer, en 1899 Fleming recibió un título de “Conservador del Archivo de Fotografías Astronómicas” en Harvard, siendo el primer cargo institucional en Harvard que se concedía a una mujer.

En 1906 también fue la primera mujer que logró una plaza honoraria en la Royal Astronomical Society de Londres.

Williamina Paton Stevens Fleming (1857-1911), circa 1890s. (Courtesy Curator of Astronomical Photographs at Harvard College Observatory)

Pero ¿cuáles fueron sus méritos?

En 1881 el profesor Edward Charles Pickering ofreció a Williamina Fleming un empleo temporal en el Hardvard College Observatory consistente en rutinarios trabajos de oficina. Gracias a sus cualidades, con el tiempo se convirtió en una trabajadora fija con decenas de mujeres jóvenes bajo su supervisión con el encargo de realizar cálculos matemáticos. En definitiva, su grupo se podría considerar como los “ordenadores” de la época.

Ideó un sistema de clasificación estelar basada en el espectro de la estrella, contribuyó a la confección del catálogo estelar de Henry Dreyer (HD) catalogando más de 10.000 estrellas. Descubrió 59 nebulosas (entre ellas IC2149), 310 estrellas variables y 10 novas. En 1910 descubrió propiedades de los espectros de las enanas blancas.

Pero tal vez su descubrimiento más conocido sea el de la Nebulosa Cabeza de Caballo.

Rafa Caballero en el foro de la AAH publicó una entrada muy interesante acerca del grupo de Pickering. Eran otros tiempos, pero resulta muy emocionante ver cómo se trabajaba en el avance científico-astronómico con los medios de la época.

http://www.asociacionhubble.org/portal/index.php/foro/viewtopic.php?f=8&t=37370&p=341544&hilit=williamina#p341544

Me imagino a todas aquellas señoritas cotejando infinidad de placas fotográficas para confirmar las posiciones de las estrellas de antiguos catálogos y descubriendo nuevos objetos que hasta ese momento habían pasado desapercibidos.

Me imagino a Fleming descubriendo IC2149 observando una placa al estilo de las que nos ofrece en la actualidad Simbad/Aladín:


Y volviendo a centrarme con IC2149, comentar que según un estudio realizado por el mexicano R. Vázquez e.a. (http://iopscience.iop.org/0004-637X/576/2/860/pdf/0004-637X_576_2_860.pdf) llegaron a la conclusión que IC2149 puede ser clasificada como planetaria bipolar, presentando una forma de diábolo.

Situada a unos 3.600 años luz de distancia, algunos estudiosos consideran que teniendo en cuenta las características físicas de la estrella central de IC2149, nuestro Sol producirá al morir una nebulosa planetaria similar a ella.

Muchos alicientes para visitar este pequeñito redondel nebuloso.

sábado, 14 de diciembre de 2013

Stock 8 e IC417 - Cúmulo abierto asociado a nebulosidad en Auriga

La noche del 2 de noviembre de 2013 mientras estaba observando unos cuantos cúmulos abiertos en Auriga recordé mi lista de objetos pendientes del catálogo Stock donde aparecían algunas entradas que pertenecían a esta rica constelación. De entre ellas me llamó la atención Stock 8, ya que me había anotado en el margen que era un cúmulo abierto asociado a nebulosidad (IC417). Así que al final decidí dirigir mi telescopio SC de 235mm hacia allí.

Este es el dibujo que hice utilizando el ocular Nagler de 16mm y alternando la observación con el filtro UHC y sin él:


Mi primera intención es centrarme en el cúmulo abierto, pero nada más poner el ojo en el ocular mi atención se dirige hipnóticamente hacia Phi Aurigae, una flamante estrella que brilla con magnitud 5,1 que debido a su clase espectral K3 IIIp, presenta un atractivo y marcado color amarillo, medio anaranjado. A su alrededor puedo ver un bonito séquito estelar que la secunda.

Pero superada esta primera impresión en la zona inferior del ocular percibo un gran número de estrellas azuladas, mucho más débiles, pero que sí ofrecen ese aspecto típico de cúmulo abierto. Ciertamente me encuentro ante Stock 8. Cuento cerca de una veintena de componentes, muchas de ellas bastante débiles, sólo cuatro o cinco mantienen un poco el tipo brillando alrededor de la magnitud 9. Esto me hace pensar que este cúmulo observado desde un cielo con cierta contaminación lumínica o con una Luna con fase avanzada, pasaría completamente desapercibido, así como la nebulosidad que lleva asociada.

En medio de tanta estrella podemos ver la doble catalogada como STF707, que podremos considerar como triple si tenemos en cuenta una componente C que está catalogada junto la estrella principal como BU889. Esta triada estelar se encuentra en la parte central inferior del dibujo formando un triángulo isósceles. La estrella principal brilla con magnitud 9,4; a 18,2” encontramos la secundaria en un ángulo de posición de 133º. La tercera componente se sitúa a 27,8” de la principal con un ángulo de posición de 200º. Siendo la más débil de las tres, brilla con una magnitud de 11,5, con lo que se convierte en una componente exigente a la hora de ser observada.

Una vez considero que ya no puedo exprimir más a Stock 8, decido centrarme en la nebulosidad asociada. Sin filtro no noto nada, así que decido utilizar el filtro UHC para percibirla. Cuando acostumbro la vista a la presencia del filtro noto como toda la zona del cúmulo aparece envuelta en una nebulosidad muy tenue, al igual que alrededor de Phi Aurigae. No puedo decir que se vea con meridiana claridad, pero sí que se nota su presencia.

Una zona muy interesante.

Podemos finalizar la observación tal como hice yo: visitando de nuevo M38 y NGC1907 que se encuentran aproximadamente a 1,5º.

Stock 8 es un cúmulo abierto muy joven situado a unos 8.150 años luz de distancia extendiéndose a lo largo de 23 años luz. Fue descubierto por Jurgen Stock en 1954.

IC417, descubierta en 1892 por Max Wolf, es una gran nebulosa de emisión que es conocida también como la Nebulosa de la Araña.

Esta vez no pude tomar una fotografía, aunque me dejo pendiente intentar hacer una de gran campo, a ver qué resultado obtengo, ya que la zona poblada de cúmulos abiertos y nebulosidades es espectacular. Con todo, adjunto una foto que he sacado de Aladín donde aparecen las componentes de Stock 8 con más detalle:

SIMBAD database, operated at CDS, Strasbourg, France
Y me gustaría concluir con esta impresionante fotografía de la zona hecha por Madratter:

http://www.astrobin.com/65760/B/

jueves, 12 de diciembre de 2013

NGC1664 - Cúmulo abierto en Auriga

En la constelación de Auriga podemos encontrar cerca de su frontera con Perseus un cúmulo abierto bastante extenso y rico catalogado como NGC1664. Situado a unos 3.900 años luz de distancia, con una magnitud aparente de 7,6 y extendiéndose unos 18’ en el cielo, fue descubierto por William Herschel en 1786.

Auriga es rica en cúmulos abiertos y si nos planificamos una sesión de observación basándonos en este tipo de objeto, no podemos olvidar de hacer una visita a los tres Messier, M36, M37 y M38, los más impresionantes de la zona, y si hay tiempo, también son aconsejables NGC1778, Stock 10, NGC1893 o NGC2281. Y sin lugar a dudas, podemos añadir a la lista a NGC1664.

Carta generada con Cartes du Ciel

La noche del 2 de noviembre de 2013 tuve ocasión de visitarlo con mi SC de 235mm y observando en una noche con temperatura agradable, sin Luna, buena estabilidad atmosférica y unos cielos rurales envidiables.

Este es el dibujo que hice a 75,81x:



Lo primero que pensé al poner el ojo en el ocular fue que me encontraba ante un cúmulo abierto no comparable con los Messier de la zona, pero con cierto encanto personal.

Ideal para utilizar oculares de campos amplios, estuve un buen rato contemplándolo con tranquilidad con el Hyperion Aspheric de 31mm, y al final llegué a la conclusión que la disposición de sus estrellas me recordaba la típica hilera de hormigas que podemos encontrarnos en un día soleado de verano, y la estrella más brillante del campo, la TYC2906-152-1, de magnitud 7,5, representaría la hormiga reina.

Como en la mayoría de cúmulos abiertos nuestra imaginación juega un papel importante a la hora de interpretar lo que nos sugiere la posición de sus componentes. Con NGC1664, en mi caso ha sido un grupo de hormigas, pero otros observadores han visto en él una cometa volando, un diamante o un trébol de cuatro hojas. Pero aquí no hay reglas fijas, y en esto reside precisamente la gracia de este cúmulo.

Cuento más de 40 estrellas, la gran mayoria alrededor de la magnitud 11 que forman hileras estelares dejando entre ellas “espacios vacíos” que proporciona una vista bastante peculiar.

Componentes blanco-azuladas no demasiado brillantes, pero si con el suficiente brillo y uniformidad como para ofrecer un bonito espectáculo. Cuando he acabado con su observación he pensado que he estado disfrutando de un cúmulo abierto muy agradecido si lo observamos con las condiciones adecuadas.

Al final hasta me animé a sacarle una fotografía con mi Nikon D5100 acoplada al telescopio:



lunes, 9 de diciembre de 2013

Fotografías de M81 y M97

Normalmente cuando veo fotografías astronómicas hechas por aficionados que han alcanzado una gran calidad en sus trabajos suelo admirar su belleza sin pararme a pensar en la dificultad que entraña hacer este tipo de imágenes.

Pero sólo hasta el momento en que decido coger mi Nikon D5100, acoplarla al telescopio e intentar por mí mismo sacar alguna foto medio decente. Es entonces cuando valoro en su justa medida todo lo que representa la consecución de este tipo de imágenes.

La noche del 7 de diciembre de 2013 me encontraba disfrutando de unos cielos oscuros, bien lejos del trajín diario de la ciudad, y una vez acabado de montar todo el equipo, levanté la cabeza hacia el cielo y estuve un buen rato, como embobado, reconociendo constelaciones y admirando la majestuosidad del cielo de invierno.

Son momentos impagables en los que me noto en comunión con la naturaleza y con la infinidad de generaciones que nos han precedido y que también disfrutaron (o temieron) en su momento del espectáculo inalcanzable que se brinda sobre nuestras cabezas.

La belleza del cielo en un lugar sin apenas contaminación lumínica, en una noche despejada y diáfana hizo que prácticamente me olvidara de los 2° C a los que me encontraba. Aunque tengo que reconocer que las tres capas de ropa que llevaba, el anorak, el pasamontañas y las botas con dos pares de calcetines también ayudaban lo suyo.

Estaba tan a gusto que decidí pasar una noche de observación tranquila, así que cogí mis prismáticos 15x70 y me dispuse a ir visitando objetos asequibles que podemos encontrar por las constelaciones de Orión, Monoceros, Can Mayor, Auriga, Taurus… y para que el telescopio no permaneciera ocioso, decidí intentar sacar unas fotos de la galaxia M81 y de la planetaria M97, ambas en Ursa Major.




El resultado de las fotografías es muy mejorable, pero las horas que pasé con mis prismáticos descubriendo cúmulos abiertos, globulares, nebulosas, estrellas dobles… a pesar que no tomé ninguna nota ni hice ningún dibujo, se quedan grabados en mi memoria en el rincón de noches de observación memorables.

viernes, 6 de diciembre de 2013

NGC1545 - Cúmulo abierto en Perseus

En la entrada correspondiente a la observación que hice del cúmulo abierto NGC1528 el 24 de octubre de 2009 comenté el hecho que según algunos autores, NGC1528 y NGC1545 al encontrarse separados en el cielo por poco más de 1º, poseer edades, distancias y velocidades similares... podrían ser considerados como un “Doble Cúmulo”, con lo que en Perseus encontraríamos dos dobles cúmulos: NGC1528/NGC1545 y el famoso NGC869/NGC884.

Carta generada con Cartes du Ciel

Pero para ser sinceros, estéticamente no hay color entre unos y otros, así que aconsejo observar NGC1528/NGC1545 sin los condicionantes de querer compararlos con NGC889/NGC884.

Por mi parte me quedó pendiente dibujar NGC1545 y curiosamente quedó en el olvido hasta la noche del 2 de noviembre de 2013 en que, por casualidad, releí la entrada de NGC1528 y decidí que ya era hora de apuntar el telescopio hacia NGC1545.

Lamentablemente, las observaciones de ambos están hechas con telescopios diferentes, el SC de 127mm para NGC1528 y el SC de 235mm para NGC1545, por lo que tampoco valdrán en este caso las comparaciones entre uno y otro. Espero que algún día pueda hacer una observación más coherente de esta pareja de cúmulos, pero hasta que llegue la ocasión, me contentaré con lo que he podido hacer hasta ahora.

Este es el dibujo de NGC1545 a 75,81x que me proporcionaba mi Hyperion Aspheric de 31mm acoplado al SC de 235mm:



A pesar que estos dos cúmulos resultan ideales para pequeños telescopios, es aconsejable observarlos desde cielos oscuros para poderles sacar el máximo partido. Además, con instrumentos de abertura pequeña o moderada seremos capaces de encajar a ambos en un ocular de gran campo.

Centrándome en NGC1545 comentar que fue descubierto el 28 de diciembre de 1790 por William Herschel, presenta una extensión de 12’ y se estima que se encuentra a una distancia de 2.470 años luz.

Si bien la disposición de las estrellas es mucho más atractiva en NGC1528, el gran aliciente de NGC1545 es la presencia de dos estrellas dobles muy espectaculares gracias a su contraste cromático.

Por un lado, en el centro del dibujo encontramos S445, que según como se mire podríamos incluso considerarla como triple. Su problema es la excesiva separación entre componentes (71,6” entre A/B y 150,1” entre A/C). Sin embargo el brillo de estas tres estrellas (mag. 7,3/8,2/9,3) que destaca por encima de las componentes del cúmulo, permite que acaparen todo el protagonismo nada más poner el ojo en el ocular. La estrella principal se aprecia con un marcado color anaranjado que contrasta a la perfección con el azulado de B.

Por otro lado tenemos STF519, que en el catálogo del WDS aparece como triple, aunque a efectos estéticos la tercera componente se encuentra tan alejada de A y B (108,6”) y es tan débil (mag. 10,8) que yo la percibo más como doble que como triple. En el dibujo es la pareja situada en la parte superior derecha.

La separación entre la estrella principal de magnitud 7,9 y la secundaria, de 9,4 es de 18,3”. La componente A ofrece un fuerte color anaranjado, mientras que la componente B presenta un bonito contraste con su color azulado.

Después de disfrutar de estas dos dobles me fijo en el resto de componentes del cúmulo, más débiles, pero que también presentan una variedad de colores muy atractiva, predominando los amarillos y los azulados.

En conclusión, una pareja de cúmulos que bien vale una visita cuando estemos observando los muchos alicientes que podemos encontrar en la constelación de Perseus.

sábado, 30 de noviembre de 2013

Cometa C/2012 S1 – ISON - Nevsky-Novichonok en su perihelio

El 21 de septiembre de 2012 los astrónomos Vitali Nevski y Artyom Novichonok del International Scientific Optical Network (ISON) descubrieron un nuevo cometa que fue catalogado como C/2012 S1 (ISON).

Copyright © 2012 by A. Novichonok (ISON-Kislovodsk Observatory, Russia)

En principio, esta noticia no tendría por qué ser más o menos importante que cualquier otro de los descubrimientos cometarios que se producen, pero ya desde un primer momento los astrónomos se dieron cuenta que no se encontraban ante un cometa normal.

El ISON fue descubierto cuando se encontraba entre las órbitas de Júpiter y Saturno a unas 6 UA (Unidades Astronómicas), o lo que es lo mismo, a unos 900 millones de kilómetros de la Tierra y presentaba una magnitud cercana a la 19, un brillo bastante alto en comparación con otros cometas situados a la misma distancia. Calculada su órbita se pudo comprobar que en su perihelio pasaría bastante cerca del Sol, aproximadamente a unos 1.860.000 kilómetros (0.0124 UA), con lo que según la composición del ISON, éste podría convertirse en un cometa extremadamente brillante.

Sin embargo, la historia no es siempre como uno se la imagina y aunque a nivel de brillo el C/2012 S1 no ha resultado tan extremado como se esperaba, su paso cerca del Sol ha representado una experiencia realmente emocionante y espectacular.

El 10 de abril de 2013 el telescopio espacial Hubble fotografió el cometa y se llegó a la conclusión que presentaba un núcleo de unos 5 ó 6 kilómetros, una coma de unos 5.000 km de diámetro y una cola que se extiende con unos 100.000 km de longitud. Pero su magnitud, estimada en 15,5, era bastante más débil de lo que se había previsto.

Credit: NASA, ESA, J.-Y. Li (Planetary Science Institute), and the Hubble Comet ISON Imaging Science Team

Poco a poco el cometa ISON se iba acercando a una velocidad de 684.000 kilómetros por hora y los astrónomos continuaban intrigados por cómo evolucionaría.

El 12-13 de noviembre de 2013 se produjo un estallido (“outburst”) en su núcleo que hizo que aumentara de golpe su brillo hasta llegar a la magnitud 5, pero lo que estaba claro era que no alcanzaría las optimistas expectativas de cuando fue descubierto. De hecho sólo llegó a estimarse un brillo de magnitud 4 hasta que el día 28 de noviembre a las 18h 25m T.U. el cometa alcanzó su perihelio.

Ninguno de estos días fui capaz de observarlo con mi telescopio. Unos días por mal tiempo y otros por qué no me era posible por cuestiones laborales-familiares. El caso es que me tuve que contentar con empezar el seguimiento de este cometa a través de las imágenes proporcionadas por los diferentes instrumentos de la sonda SOHO. Y realmente, valió la pena.

El ISON empezó a verse a través del LASCO C3, y su evolución se pudo apreciar perfectamente. Desde su llegada a las inmediaciones del Sol; su paso por el perihelio, que provocó un descenso brusco de brillo y el alejamiento de lo que queda de él:



También pudo observarse desde con el LASCO C2:



¿Ha sobrevivido el cometa?, ¿Tendré ocasión de observarlo con mi telescopio? De momento me limito a transcribir las palabras del astrofísico del IAC Javier Licandro:

“Aún es pronto para certificar la destrucción del núcleo del cometa ISON, la información que tenemos no es concluyente.

Como era de esperar la cola sigue allí. Hay que recordar que la cola está formada por el polvo y gas que salió del cometa mayoritariamente antes del encuentro y aunque el núcleo estuviera destruido y el cometa por tanto no emitiera más polvo, seguiríamos viendo esta cola durante días hasta que el polvo se disperse en el espacio.

Los cambios que se ven en la forma de la cola se deben principalmente a que la perspectiva desde la que estamos viendo al cometa ha ido cambiando muy rápidamente dado que él se ha movido muy rápidamente en su órbita.

La cola de un cometa suele tener una forma como de abanico con el polvo disperso en el plano de la órbita del cometa, y dependiendo de la perspectiva en la que se observa se puede ver como una larga cola fina o un abanico más o menos alargado. Pero no es de esperar que la cola haya cambiado casi nada en sólo un par de días.

Probablemente, en cuanto el cometa se aleje y vuelva a aparecer en el crepúsculo, podrá verse lo que quede de cola y coma, y veremos entonces si el núcleo ha sobrevivido y sigue emitiendo material.” (http://www.iac.es/cosmoeduca/Cometa_ISON.html)

Por mi parte sólo me queda mantener la ilusión de ver el C/2012 S1, o lo que quede de él y, pase lo que pase, recordar estos días en los que he aprendido un poco más sobre estos vecinos lejanos de nuestro Sistema Solar y deleitarme con las sensacionales fotografías de Damian Peach.


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Actualización, 1 de diciembre de 2013:

He elaborado un vídeo desde la aplicación de la web www.helioviewer.org donde aparece el paso completo del cometa ISON por su perihelio. Espero que lo disfrutéis tanto como yo:


SDO (NASA), SOHO (ESA/NASA), STEREO (NASA), GSFC, LMSAL, SDAC, Stanford University, MSU/SDO-FFT


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jueves, 28 de noviembre de 2013

NGC7814 - Galaxia en Pegasus

NGC7814 es una galaxia ubicada en la constelación de Pegasus, a unos 2º y medio al oeste/noroeste de Gamma Pegasi (Algenib).

Generada con Cartes du Ciel

Situada a unos 49 millones de años luz, fue descubierta en 1784 por William Herschel. Se trata de una galaxia espiral de clase Sa-b que se extiende a lo largo de 79.000 años luz.

Brilla con una magnitud visual de 10,6, lo que podría sugerir que es fácil de observar, sin embargo, al ocupar una superficie de cielo que abarca 5,5’x2,3’, su brillo se diluye en ella, provocando que debamos dedicarle más esfuerzos que los que en un primer momento pudiéramos pensar.

Lo más habitual es que para observar galaxias sean necesarios unos cielos oscuros y buena abertura de telescopio, y con NGC7814 no resulta una excepción. De todas maneras la noche del 31 de octubre de 2013 su observación me supo a gloria.

La explicación es sencilla. Previamente había apuntado hacia la zona donde debería encontrarse el Quinteto de Stephan, el famoso grupo compacto de 5 galaxias en la misma constelación de Pegasus al cual llevo persiguiendo desde hace algunos años.

En esta ocasión, después de estar un buen rato escrutándolo, sólo he sido capaz de ver dos galaxias… y media, de las cinco que forman el conjunto. He quedado tan decepcionado que ni me he animado a hacer un pequeño boceto. Así que cuando he ido a observar NGC7814 y nada más poner el ojo en el ocular ya la he podido percibir con claridad, me ha cambiado el ánimo por completo.

Este es el dibujo que hice a 146,88x que me proporcionaba mi SC de 235mm y el Nagler de 16mm:



Pero bien mirado, no sé de qué me alegré tanto. NGC7814 es una galaxia barrada, y con buenas condiciones de la noche y un telescopio de buena abertura debería ser posible observar esa línea de polvo que la atraviesa de parte a parte. De hecho, también se la conoce como el “Pequeño Sombrero”, al compararla con la espectacular M104. El parecido, sobretodo en fotografía es realmente sorprendente:

http://apod.nasa.gov/apod/ap131025.html

Sin embargo, en visual, por lo menos con mi experiencia durante esta noche, nada que ver.

Adaptando bien la vista a la oscuridad puedo percibir un núcleo brillante, grande y ovalado y cuando utilizo la vista lateral, lo noto rodeado por un pequeño halo, halo que desaparece en cuando miro fijamente la galaxia.

Estoy un buen rato con NGC7814 intentando distinguir su barra central, pero siendo sincero, no he visto ni rastro de ella. De todos modos, cuando he decidido que no sería capaz de exprimirla más, me he limitado a observar con tranquilidad y sosiego y he llegado a la conclusión de que se trata de una galaxia agradecida. Con paciencia, buenas condiciones de observación y un telescopio de abertura generosa puede llegar a ser verdaderamente espectacular.

sábado, 23 de noviembre de 2013

NGC7640 - Galaxia en Andromeda

Cuando visito la zona de la constelación de Andromeda nunca me olvido de apuntar el telescopio hacia M31 y sus vecinas M32 y M110; tampoco olvido deleitarme con la belleza cromática de Almach y con el azul marcado de NGC7662, una de mis planetarias preferidas. Y normalmente, no voy más allá.

Sin embargo la noche del 31 de octubre de 2013 aprovechando unos cielos oscuros y mi SC de 235mm decidí echar un vistazo a una galaxia no muy conocida debido precisamente a su prominente vecindario. Se trata de NGC7640.

Situada a unos 29 millones de años luz de distancia, NGC7640 es una espiral barrada del tipo SB con una magnitud estimada de 10,9 y que se extiende a lo largo y ancho de 10,5’ x 2’ de cielo.

Este es el dibujo que hice a 146x con el ocular Nagler de 16mm:



Por lo que pueda parecer por los datos que he dado y por el dibujo que he hecho, esta galaxia no es nada fácil, al contrario, es complicada de observar. Y es una lástima, por qué si fuera un poco más brillante sería realmente espectacular.

Enmarcada en un bonito campo estelar, la posición donde debería estar la galaxia es fácil de localizar al encontrarse en el interior del triángulo estelar formado por TYC3234-649-1 (mag. 11,3), TYC3234-471-1 (mag. 11,1) y TYC3234-331-1 (mag. 11,0). Sin embargo, en un primer momento, al poner el ojo en el ocular, no veo ni rastro de NGC7640, lo que definitivamente me hace tomar conciencia de que no será tarea fácil la caza de esta galaxia.

De todas maneras, en estos casos lo importante es saber dónde fijarse y gracias a la referencia de las tres estrellas de magnitud 11 que he comentado, este paso lo tenemos fácil.

Apago la linterna después de dibujar las estrellas más brillantes que veo en el campo, respiro hondo, empiezo a adaptar la vista a la oscuridad y voy utilizando la visión lateral. Poco a poco voy notando como aparece una “nebulosidad” muy tenue, que aparece y desaparece conforme miro fijamente o miro de reojo.

Se extiende con una forma alargada, estrecha, con unas zonas más marcadas que otras, pero sin poder concretar una posición definida, que envuelven un núcleo también alargado y un poco más evidente. Noto también dos estrellas que se encuentran superpuestas a la galaxia.

Y esto es todo. Por más que lo intento no consigo ver más detalles de NGC7640. La impresión que me queda es estar viendo una galaxia fantasmagórica, percepción muy adecuada por otro lado en esta noche de Halloween.

En definitiva, una galaxia que exige cielos oscuros para ser observada y mucha paciencia. Si la noche acompaña valdrá la pena es tiempo que le dediquemos.

sábado, 16 de noviembre de 2013

NGC559 - Cúmulo abierto exigente en Cassiopeia

El 9 de noviembre de 1787 William Herschel descubrió un cúmulo abierto en la rica constelación de Cassiopeia que posteriormente sería catalogado como NGC559, conociéndose también como Collinder 13 ó Caldwell 8.

Situado a unos 3.700 años luz de distancia, no puede considerarse un objeto de fácil observación. Stephen James O’Meara es su libro “The Caldwell Objects” comenta que el cúmulo está formado por unas 120 componentes, pero que de todas ellas tan sólo unas cuarenta presentan una magnitud 12 o más brillante. Por mi parte, la estrella más destacada que observé en él fue la TYC 4035-345-1, de magnitud 10,5.

Cuando hablamos de objetos con las características como las de NGC559, resulta muy interesante poder leer experiencias de varios observadores que han utilizado diferentes instrumentos y se han encontrado con variadas condiciones de observación. Estoy seguro que según el observador y sus condicionantes, este cúmulo puede llegar a pasar completamente desapercibido o puede ofrecer una vista realmente atractiva, como fue mi caso la noche del 31 de octubre de 2013 en que pude observarlo desde unos cielos oscuros con mi SC de 235mm.

Este es el dibujo que hice:



Resultó una verdadera lucha de titanes el intentar distinguir el máximo número de componentes y plasmarlas en el dibujo. Seguro que me dejé algunas en el tintero, con lo que me gustaría advertir que visto en directo se aprecia de manera mucho más espectacular de como al final quedó mi dibujo.

Como digo, es un cúmulo abierto realmente complicado al estar formado por un buen número de débiles componentes, pero observado con las condiciones ideales, es muy atractivo. Indispensable para sacarle todo el partido que puede ofrecer, unos cielos bien oscuros, una noche con buena estabilidad atmosférica y un telescopio de abertura generosa.

Hace unos años intenté observarlo con mi SC de 127mm desde unos cielos con cierta contaminación lumínica y fui incapaz de ni tan siquiera intuirlo.

E incluso la noche que lo observé con mi SC de 235mm tuve un momento de confusión cuando estaba utilizando el ocular de gran campo (Hyperion Aspheric de 31mm) para localizarlo. Cuando llegué a la zona donde debía encontrarse y puse el ojo en el ocular, vi un rico campo estelar y pensé, “pues no es tan complicado”. Pero en seguida recordé que NGC559 estaba formado por débiles estrellas y que abarcaba tan sólo unos 6’ de cielo.

Entonces, a medida que iba adaptando la vista a la oscuridad noté que en una zona del amplio campo que tenía ante mí, parecía que iba surgiendo una especie de nebulosidad. Nebulosidad que coincide con las descripciones hechas por otros astrónomos aficionados cuando observan NGC559 con telescopios pequeños o prismáticos.

Habiendo comprendido que esa nebulosidad era mi objetivo, decidí utilizar el ocular Nagler de 16mm (146x) y ver qué ocurría.

Al poner el ojo en el ocular pude comprobar que esa nebulosidad no era tal, sino que en realidad se trataba de un buen número de estrellitas débiles compactadas en una pequeña parte de cielo. En ese momento recordé a Messier y sus “nebulosas” que al final resultaron ser cúmulos globulares o galaxias.

Y fue curioso. Primero fui capaz de contar unas 10 estrellas que formaban NGC559, pero a medida que mi vista se adaptaba a la nueva situación y utilizaba la visión lateral, iban apareciendo un incontable número de chisporroteantes estrellitas que consiguen que la sensación de “nebulosidad” vuelva a estar presente por momentos.

En el dibujo decidí tan sólo plasmar las estrellas que detectaba con mayor o menor seguridad, dejando un poco de lado el aspecto “nebuloso”, por lo que mi consejo es que si se puede, se intente verlo en directo. Si las condiciones son las adecuadas, valdrá la pena. Aparte que la dificultad del dibujo radica también en el hecho de que en el momento en que enciendo la linterna roja, necesito unos cuantos minutos de readaptación a la oscuridad antes de poder volver a ver de nuevo el crepitar estelar.

Las estrellas más brillantes son la tríada formada por TYC4035-913-1 (mag. 10,9); TYC4035-445-1 (mag. 11,6) y TYC4035-967-1 (mag. 11,9), en el centro del dibujo. Y en la parte superior derecha, la más brillante del grupo, TYC4035-345-1 (mag. 10,5).

En cuanto al color de las estrellas, es otro complicado aliciente. A la mayoría de componentes las distingo de un color grisáceo, pero muchas también las noto con un tono rojizo, pero al ser tan débiles es difícil concretar el color.

En definitiva, con las condiciones adecuadas, NGC559 resulta un cúmulo espectacular que bien vale una visita y el tiempo dedicado a intentar sacarle todos sus atractivos, que son muchos. De todas maneras, después de todo, me quedo con las ganas de saber cómo se vería con un telescopio de mayor abertura.

Antes de empezar con la observación de NGC559 tenía la Nikon D5100 acoplada al telescopio y pensé que tratándose de un cúmulo de estrellas tan débiles estaría bien comprobar cómo aparecía en fotografía. Y este fue el resultado, a la vista del cual continúo con las ganas de verlo con un telescopio mayor:



viernes, 8 de noviembre de 2013

M76 - La "Pequeña Dumbbell" en Perseus con el SC de 235mm

Cuando observo a través de mi telescopio muchas veces pienso en todas aquellas personas que a lo largo de la historia han apuntado sus instrumentos al cielo. Me pregunto sobre todo qué debían sentir los astrónomos pioneros escrutando el cielo, descubriendo objetos que nadie antes había podido observar, y ya no sólo eso, sino la dificultad de interpretar lo que estaban viendo.

Este pensamiento recurrente me vino a la cabeza la pasada noche del 31 de octubre de 2013 observando desde un cielo oscuro con mi SC de 235mm la nebulosa planetaria catalogada como M76, la “pequeña Dumbbell”.

Y hablando de esta planetaria y como pequeño homenaje a algunos de estos observadores, comentar que el 5 de septiembre de 1780 Pierre Méchain dejó anotado: “Esta nebulosa no contiene estrellas, es pequeña y débil”. Acababa de descubrir el objeto que más tarde sería catalogado como M76.

Charles Messier, el 21 de octubre de 1780 concretó la posición en la que se encontraba y anotó que “no estaba sino compuesta por pequeñísimas estrellas, aunque contenía nebulosidad”.

William Herschel en 1787 se acercó un poco más a lo que realmente es. Apuntó: “Dos nebulosas juntas cercanas, ambas muy brillantes”.

De hecho, al elaborarse el New General Catalogue (NGC), se le asignó dos números, diferenciando así la nebulosa en dos partes independientes, NGC650 y NGC651.

En 1866 William Huggins confirmó que su espectro era gaseoso, pero no fue hasta 1918 en que Heber Doust Curtis la clasificó definitivamente como una nebulosa planetaria.

Mi historia con M76 empieza el 25 de octubre de 2008 que pude observarla con mi SC de 127mm:

http://laorilladelcosmos.blogspot.com.es/2009/09/m76-nebulosa-planetaria-en-perseus.html



Me dejó realmente impresionado, quedándome unas ganas tremendas de poder disfrutarla con un telescopio de mayor abertura.

Pero volvamos a la noche del 31 de octubre de 2013. Este es el dibujo que hice después de estar observándola un buen rato. Se nota la mayor abertura, los cielos más oscuros y una noche con muy buena estabilidad atmosférica:



 Y éstas son las notas que tomé:

“A esto me refería cuando comentaba hace un tiempo que tenía que dejar un poco de lado los retos observacionales y revisitar con mi SC de 235mm todos los Messier que pude observar con mi SC Nexstar 5i de 127mm.

Si M76 ya me impresionó con el telescopio pequeño, esta noche, aprovechando unos cielos oscuros, unas condiciones ideales y un telescopio de buena abertura, me ha dado la sensación de estar observando un objeto diferente.

La contenida turbulencia atmosférica de la noche (estimo un “seeing” de 4/5, siendo 5=óptimo), me permite utilizar el ocular de 10mm, alcanzando con él unos generosos 235x, con lo que M76 se presenta con un tamaño más que respetable.

De acuerdo, no es M27, nuestra “Dumbbell” de toda la vida, pero como ya comenté en su día, lo mejor en este caso es intentar evitar comparaciones que sólo nos conducirán a no disfrutar plenamente de M76. De no existir M27, a nadie se le ocurriría calificar de “pequeña” a M76.

Escoltada por dos estrellas de una magnitud cercana a la 12, M76 se me presenta con dos partes nebulosas bien diferenciadas y como si estuviera partida por el centro.

Una de las partes de la nebulosa la veo mucho más marcada y compacta que la otra, que aunque más extensa se muestra mucho más difusa.

No me canso de observarla. Es realmente emocionante ir descubriendo tenues detalles cuanto más acostumbrada a la oscuridad tengo la vista.

Al cabo de un rato pruebo a acoplar los filtros UHC y OIII. Como es habitual, las estrellas más débiles desaparecen por completo, viéndose la nebulosa un poco mejor definida.

Con todo, gracias a las excelentes condiciones de la noche prefiero disfrutarla sin filtros.

Una maravilla”.

Para concluir, adjunto la foto de recuerdo que hice acoplando la Nikon D5100 a foco primario del SC de 235mm:


La misma con un nuevo procesado (2016-03-13):




La estrella brillante que aparece en la fotografía es HIP8063, de magnitud 6,7 y un potente y bonito color amarillo-anaranjado. Una excelente compañera de M76 cuando se utiliza un ocular de gran campo y pocos aumentos.

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Astronomy Sketch of the Day (ASOD) - 2013-11-11:
http://www.asod.info/?p=10941