Después de disfrutar con unos prismáticos de los cúmulos abiertos de las Híades y de las Pleiades, podemos coger el telescopio y visitar otro cúmulo abierto de la constelación de Taurus: NGC 1647. En nada comparable a los otros dos, sin embargo, desde unos cielos relativamente oscuros, ofrece un sensacional espectáculo.
NGC 1647 se encuentra situado a unos 1.700 años luz de distancia, tiene una edad de 190 millones de años, siendo, aproximadamente 400 millones de años más joven que las Híades. Fue descubierto por William Herschel el 15 de febrero de 1784.
La noche del 6 de noviembre de 2010 tuve ocasión de dirigir mi telescopio hacia este interesante cúmulo. Este es el dibujo que hice con mi SC de 127mm a 40,32x:
Es necesario aprovechar una noche oscura para poder sacarle todo el partido a NGC 1647, ya que se encuentra formado por un buen número de estrellas que brillan con unas magnitudes entre la 8ª y la 12ª. Yo no he podido exprimirlo del todo, pero no puedo quejarme con el resultado.
En la parte inferior izquierda del dibujo aparecen dos estrellas anaranjadas que si sufrimos de cierta contaminación lumínica, van a robar todo el protagonismo al cúmulo. Son la HIP22176, con magnitud 5,96 y clase espectral K4 III, que además es una binaria espectroscópica... y la HIP22161, más débil (mg. 7,46) y de clase espectral K0. Para estar un buen rato disfrutando de sus marcados colores.
Pero no debemos dejarnos hipnotizar por el atractivo cromático de estas dos estrellas y tenemos que fijarnos justo a su lado como, a medida que adaptamos la vista a la oscuridad, van apareciendo más y mas estrellas. Estrellas que constituyen nuestro principal objetivo, que no es otro que el cúmulo abierto NGC1647.
Está formado por un buen número de estrellitas (cuento aproximadamente una treintena), de brillo homogéneo y esparcidas por una generosa superficie celeste. De hecho, me ocupa casi todo el campo de mi Hyperion Aspheric de 31mm (72º), que no es poco...
Dejando aparte la HIP22176 y la HIP 22161, que sinceramente parecen dos intrusas, la mayoría de las estrellas del cúmulo las veo azuladas, a excepción de una bonita doble que se encuentra a la derecha del dibujo y que está formada por las dos estrellas que parecen ser las más brillantes del cúmulo. Se trata de la doble AG 311, con una primaria de magnitud 8,90 y una secundaria de magnitud 9,32; separadas por unos generosos 33” en un ángulo de posición de 112º. Ambas lucen unas tonalidades amarillentas muy atractivas. Un toque de distinción para un cúmulo muy homogéneo.
Investigando un poco he comprobado que AG 311, no es sólo binaria, sino que está considerada triple. Estos son los datos que aparecen en el WDS para las tres componentes:
04459+1911 AG 311AB - AP: 112º / Sep. 33.0” / Mag. 8.90 9.32 / Clase espectral: A0
04459+1911 CTT 8AC - AP: 173º / Sep. 54.3” / Mag. 8.90 9.70
Ya he comentado al principio, que hacen falta cielos oscuros para sacar todo el partido al cúmulo, y, lamentablemente, la humedad que había esta noche en el ambiente y ciertas luces vecinas me han impedido fijarme en la tercera componente (en consecuencia, no aparece en mi dibujo). Una razón más para volver a observar NGC 1647 con más calma cuando tenga unas mejores condiciones de observación.
En definitiva, he pasado un buen rato con este cúmulo abierto... antes que unas nubes que al empezar la noche amenazaban en el horizonte hayan acabado de adueñarse definitivamente del cielo y me hayan obligado a plegar velas.
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