Hacía tiempo que no observaba la Luna, y no por falta de ganas, ya que siempre que apunto el telescopio hacia ella siempre encuentro algún aliciente que me hace mantener el ojo pegado al ocular durante un buen rato.
La noche del 31 de mayo de 2012 la Luna se encontraba en su onceava noche de lunación y estaba iluminada en el 82% de su superficie.
Gasendi, Kepler, Schiller, Montes Jura… y alguna que otra formación más ofrecen esta noche vistas espectaculares asequibles a pequeños telescopios. Sin ir más lejos, apuntando mi SC de 127mm al Norte de nuestro satélite, “descubrí” una zona que desconocía y que me atrajo especialmente. Este es el dibujo que hice a 250x de lo que más me llamó la atención:
Lo primero que destaca, es el cráter Anaxágoras, que con un diámetro de 51 km. presenta la típica imagen del cráter recién bañado por el día lunar. Por su vertiente más cercana al terminador el Sol se refleja iluminando con un fuerte brillo su pared interna. Por el otro lado, una negra oscuridad provocada por la pared opuesta, es la única zona que se resiste a la luz solar. Un atractivo juego de luces y sombras. Esta noche también se pueden ver los rayos de eyecta que dejó la reciente formación de Anaxágoras.
Observando este cráter se aprecia claramente que se encuentra superpuesto a otro cráter mucho más antiguo, Goldschmidt. Con sus 121 km. de diámetro se encuentra muy afectado por el paso del tiempo, de tal manera que sus paredes en la zona norte, prácticamente han desaparecido. Es un bonito contraste ver claramente marcado Anaxágoras frente a un disimulado Goldschmidt.
Pero a su lado, se adivina el cráter Barrow, colgado de una manera más uniforme, completamente iluminado ya por el Sol, cosa que le proporciona un aspecto un poco fantasmagórico… igual que el que ofrece su vecino Metón.
Esta sucesión de cráteres: Anaxágoras, Goldschmidt, Barrow y Metón me ha mantenido un buen rato encandilado, tanto que decido sacar la cámara DBK21AU4.AS y la barlow x2 que monto en el SC Nexstar 5i de 127mm:
Vuelvo a poner el ojo en el ocular y continuando el viaje hacia el Norte lunar reparo en Scoresby, un cráter muy parecido a Anaxágoras, y a su lado Challi y Main dos cráteres imbricados vistos en perspectiva que parecen formar un bonito 8 achatado.
Antes de dejar la zona, me fijo en Epígenes, un prometedor cráter medio camuflado de 55 km. de diámetro rodeado de curiosos accidentes que dejo apuntado revisitar en otra ocasión, a ser posible con mi SC de 235mm. Me parece que esta zona agradecerá forzar un poco más los aumentos. Pero no me quejo, mi SC de 127mm se ha portado esta noche como un jabato, aguantando con dignidad los 250x.
Para acabar dejo la misma fotografía rotulada:
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