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domingo, 28 de junio de 2009
M39 - Cúmulo Abierto en Cygnus
M39 es un cúmulo abierto en la constelación de Cygnus que se encuentra a 1.000 años luz de distancia. Después de las Pleyades, las Hyades y la Cabellera de Berenices es el cúmulo abierto más cercano a nosotros.
Es muy extenso y para poder apreciarlo en toda su plenitud es necesario observarlo con pocos aumentos. Presenta un buen número de componentes, destacando especialmente unas cinco o seis que brillan con una magnitud alrededor de 6-7 y que se encuentran repartidas por todo el cúmulo.
En un primer vistazo se diría que tiene una forma de triángulo equilátero invertido: la estrella que he dibujado en la zona inferior sería la “punta”, desde donde se iría extendiendo este “triángulo”. De todas maneras, he de reconocer que una vez te sumerges en el cúmulo, pierde esta perspectiva triangular. Es divertido ir inventando interrelaciones entre sus diferentes componentes y descubrir dos parejas con vocación de dobles y unos caminos que van de una estrella brillante a otra.
Para disfrutar un buen rato.
sábado, 27 de junio de 2009
M29 - Cúmulo Abierto en Cygnus
M29 es un cúmulo abierto en la constelación de Cygnus situado a unos 4.400 años luz de distancia, en otras palabras y para que nos situemos un poco, la luz que vemos a través de nuestro telescopio salió de su punto de origen aproximadamente cuando en el Egipto de los faraones gobernaba la dinastía V en el período conocido como Imperio Antiguo.
Lo que resulta más vistoso del cúmulo es la disposición de sus 6 estrellas más brillantes en forma de cáliz -interpretación mía- o en forma de paréntesis invertidos ) ( -interpretación de Sue French - y no tanto su número de componentes. Es ideal para ser observado desde lugares con cierta contaminación lumínica gracias al brillo de estas seis estrellas que presentan una magnitud alrededor de la novena. Resaltar que todas ellas tienen un color “metálico”, entre blanco y azulado.
No es demasiado extenso, más bien al contrario, y no destacan demasiadas estrellas más que las 6 citadas. Aun así conviene hacerle una visita por lo estético que resulta.
Son dignas de mención, aunque no tengan nada que ver con el cúmulo, dos estrellas dobles perfectamente alineadas y que “apuntan” a M29: la WDS SEI1116 (mag. 9.16 / 10.0; Sep: 30.2” AP: 341º ), y la formada por la TYC3152-1038-1 (mag. 8,84) y la TYC3152-508-1 (mag. 10,4). En el dibujo en la parte inferior izquierda.
En definitiva, un cúmulo muy atractivo.
miércoles, 24 de junio de 2009
El Estallido del Cometa Holmes 17P
Muchas veces he reflexionado sobre el hecho que la observación astronómica me permite entrar en comunión con personas que mucho antes que yo dirigieron su mirada hacia arriba y se maravillaron en su momento, tal como me maravillo yo actualmente, de los fenómenos que pueden disfrutarse del cielo.
En relación a estas reflexiones, me ha llamado mucho la atención descubrir que alrededor del año 300 antes de Cristo, en la China, un astrónomo de la época creó un rollo de seda de 1,5m. de largo en el que dibujó 29 tipos de cometas... y sus correspondientes tipos de catástrofes que anunciaban cada uno de ellos... No debemos olvidar el contexto social de la época, en que astronomía y astrología iban a menudo de la mano, ni tampoco menospreciar la importancia del dibujo astronómico:
Y todo esto lo comento porque repasando mis notas de observación, me he reencontrado con las que tomé en octubre de 2007 referentes al cometa Holmes 17P.
Juan Antonio Henríquez Santana desde Tenerife, la noche del 23 al 24 de octubre de 2007 detectó un incremento espectacular de brillo de este cometa que, de una magnitud estimada de 17, pasó en cuestión de horas, a una magnitud de 2,5.
Este hilo del foro de la Asociación Astronómica Hubble es una excelente fuente de información sobre lo que supuso este acontecimiento:
http://www.asociacionhubble.org/portal/index.php?option=com_jfusion&Itemid=32&jfile=viewtopic.php&f=4&t=18442
La noche del 27 de octubre, cuando ya había acabado mi sesión de observación de dobles en Cassiopeia desconecté el telescopio. Pero recordando el hilo del foro me dije: “Va, ya que lo tengo todo montado, voy a probar de echarle un vistazo”. Volví a conectarlo todo, y dirigí el telescopio hacia las coordenadas en las que debía encontrarse el cometa.
Sin demasiadas expectativas (la Luna brillaba al 95%) con el ocular de 25mm (50x) vi una cosa que no había visto nunca en mi vida y que me dejó alucinado: Un puntito brillante envuelto en una corona más oscura, y ella misma, envuelta por otra más difusa. El puntito, que era el cometa propiamente dicho, no quedaba concéntrico, sino que estaba un poco desplazado hacia la derecha.
Este es el dibujo que hice, y a continuación, muestro la fotografía que dentro de mis limitaciones, saqué del espectáculo:
El 29 de octubre de 2007 volví a fotografiarlo, e hice una modesta comparativa de la evolución de su tamaño, pero que permite comprobar la espectacularidad del fenómeno:
La noche del 6 de noviembre de 2007 el Holmes 17P me proporcionó una de sus vistas más memorables. Iba perdiendo brillo, pero su proximidad a Mirfak (Perseus) me permitió regalarme una de las mejores noches que he disfrutado al pie de mi querido telescopio. Hasta yo, que queda claro que la fotografía astronómica no es lo mío, me atreví a inmortalizarlo con mi Nikon D70S y el teleobjetivo de 55-200mm:
Una de las últimas noches que tuve contacto con este cometa fue la del 11 de noviembre de 2007, en la que quise hacer un dibujo de lo que veía del cometa con el mismo aumento que el que hice la primera noche. El resultado fue espectacular:
¿Quién dice que el cielo es inmutable?
En relación a estas reflexiones, me ha llamado mucho la atención descubrir que alrededor del año 300 antes de Cristo, en la China, un astrónomo de la época creó un rollo de seda de 1,5m. de largo en el que dibujó 29 tipos de cometas... y sus correspondientes tipos de catástrofes que anunciaban cada uno de ellos... No debemos olvidar el contexto social de la época, en que astronomía y astrología iban a menudo de la mano, ni tampoco menospreciar la importancia del dibujo astronómico:
Y todo esto lo comento porque repasando mis notas de observación, me he reencontrado con las que tomé en octubre de 2007 referentes al cometa Holmes 17P.
Juan Antonio Henríquez Santana desde Tenerife, la noche del 23 al 24 de octubre de 2007 detectó un incremento espectacular de brillo de este cometa que, de una magnitud estimada de 17, pasó en cuestión de horas, a una magnitud de 2,5.
Este hilo del foro de la Asociación Astronómica Hubble es una excelente fuente de información sobre lo que supuso este acontecimiento:
http://www.asociacionhubble.org/portal/index.php?option=com_jfusion&Itemid=32&jfile=viewtopic.php&f=4&t=18442
La noche del 27 de octubre, cuando ya había acabado mi sesión de observación de dobles en Cassiopeia desconecté el telescopio. Pero recordando el hilo del foro me dije: “Va, ya que lo tengo todo montado, voy a probar de echarle un vistazo”. Volví a conectarlo todo, y dirigí el telescopio hacia las coordenadas en las que debía encontrarse el cometa.
Sin demasiadas expectativas (la Luna brillaba al 95%) con el ocular de 25mm (50x) vi una cosa que no había visto nunca en mi vida y que me dejó alucinado: Un puntito brillante envuelto en una corona más oscura, y ella misma, envuelta por otra más difusa. El puntito, que era el cometa propiamente dicho, no quedaba concéntrico, sino que estaba un poco desplazado hacia la derecha.
Este es el dibujo que hice, y a continuación, muestro la fotografía que dentro de mis limitaciones, saqué del espectáculo:
El 29 de octubre de 2007 volví a fotografiarlo, e hice una modesta comparativa de la evolución de su tamaño, pero que permite comprobar la espectacularidad del fenómeno:
La noche del 6 de noviembre de 2007 el Holmes 17P me proporcionó una de sus vistas más memorables. Iba perdiendo brillo, pero su proximidad a Mirfak (Perseus) me permitió regalarme una de las mejores noches que he disfrutado al pie de mi querido telescopio. Hasta yo, que queda claro que la fotografía astronómica no es lo mío, me atreví a inmortalizarlo con mi Nikon D70S y el teleobjetivo de 55-200mm:
Una de las últimas noches que tuve contacto con este cometa fue la del 11 de noviembre de 2007, en la que quise hacer un dibujo de lo que veía del cometa con el mismo aumento que el que hice la primera noche. El resultado fue espectacular:
¿Quién dice que el cielo es inmutable?
sábado, 20 de junio de 2009
Asterismo Oscar 1 en Cygnus
Un asterismo es un conjunto de estrellas que desde nuestro punto de vista forman figuras peculiares. Un claro ejemplo sería la W o M, según el período del año en que se observe, que vemos en la constelación de Cassiopeia. O el “Carro” de la Osa Mayor.
Gracias al telescopio, se han podido encontrar un gran número de asterismos, que a nivel científico poco aportan, pero a nivel estético suelen proporcionar unos ratos agradables de observación. En la web del Saguaro Astronomy Club (SAC), podemos encontrar un listado donde aparecen un buen número de asterismos:
http://www.saguaroastro.org/content/downloads.htm
A menudo, cuando ya estoy acabando mi sesión observacional, busco en la base de datos de mi Nexstar 5i algún asterismo con el que concluir de manera distendida la observación.
La noche del 28 de junio de 2008 después de observar y dibujar el cúmulo abierto M29, decidí dar una vuelta por los alrededores para disfrutar del espectáculo que ofrece la Vía Láctea por esa zona. Pues bien, a unos 40’ hacia el Este llegué a una estrella blanca de magnitud 5,6 que resultó ser 40 Cygni, y justo 8’ más al Este topé con un asterismo formado por cuatro estrellas. Este es el dibujo que hice a 50x a través de mi SC de 127mm:
Las tres estrellas más brillantes forman un triángulo equilátero, o una pirámide bidimensional... licencias de nomenclatura que uno puede permitirse en la soledad de la noche a pie de telescopio... Las estrellas en cuestión son TYC-3152-684-1 (mag. 8,18); TYC-3152-892-1 (mag. 10,03) y TYC-3152-864-1 (mag. 9,5). La cuarta estrella que forma el asterismo, que es la más débil, se encuentra en el centro de la base, y es TYC-3152-58-1 (mag. 10,46).
Como referencia conocida, un poco más al Este podemos observar la doble STF 2691. (mag. 8,18 / 8,43; AP. 31º; Sep. 17”) que se encarga de proporcionar al conjunto una vista espléndida.
El asterismo se encuentra concretamente en las siguientes coordenadas:
AR: 20h 28m
DEC: +38º 22’
Durante el día siguiente me dediqué a investigar por internet y por varios libros que tengo el nombre por el que era conocido este asterismo, pero no fui capaz de encontrar ninguna referencia a este grupito estelar.
No me quise dar por vencido, y en el foro de la Asociación Astronómica Hubble publiqué un post preguntando si alguien conocía este asterismo, con un resultado negativo.
Al final, me decidí enviar un correo electrónico a Sue French, colaboradora habitual de la revista Sky & Telescope y autora del fantástico libro “Celestial Sampler”, y pedir su ayuda para localizar el nombre de este asterismo. Tras varios correos, muy amablemente, me confirmó que había consultado en todas sus fuentes disponibles y no había podido encontrar un nombre que identificase este grupo de estrellas.
Pues bien, en vista que mis esfuerzos por encontrar el nombre de este asterismo no dieron fruto, decidí que, al menos para mi, este asterismo siempre sería conocido como Oscar 1 (Alias, Pirámide bidimensional). A falta de descubrir un nuevo asteroide, una doble, una supernova, un exoplaneta... me conformo con bautizar un humilde asterismo, y cada vez que se lo enseñe a mis amigos y familiares les diré: “¿Queréis ver el asterismo Oscar 1?”...
Bromas aparte, quien tenga la oportunidad de echarle un vistazo, que lo haga. Pasará un rato muy agradable.
Gracias al telescopio, se han podido encontrar un gran número de asterismos, que a nivel científico poco aportan, pero a nivel estético suelen proporcionar unos ratos agradables de observación. En la web del Saguaro Astronomy Club (SAC), podemos encontrar un listado donde aparecen un buen número de asterismos:
http://www.saguaroastro.org/content/downloads.htm
A menudo, cuando ya estoy acabando mi sesión observacional, busco en la base de datos de mi Nexstar 5i algún asterismo con el que concluir de manera distendida la observación.
La noche del 28 de junio de 2008 después de observar y dibujar el cúmulo abierto M29, decidí dar una vuelta por los alrededores para disfrutar del espectáculo que ofrece la Vía Láctea por esa zona. Pues bien, a unos 40’ hacia el Este llegué a una estrella blanca de magnitud 5,6 que resultó ser 40 Cygni, y justo 8’ más al Este topé con un asterismo formado por cuatro estrellas. Este es el dibujo que hice a 50x a través de mi SC de 127mm:
Las tres estrellas más brillantes forman un triángulo equilátero, o una pirámide bidimensional... licencias de nomenclatura que uno puede permitirse en la soledad de la noche a pie de telescopio... Las estrellas en cuestión son TYC-3152-684-1 (mag. 8,18); TYC-3152-892-1 (mag. 10,03) y TYC-3152-864-1 (mag. 9,5). La cuarta estrella que forma el asterismo, que es la más débil, se encuentra en el centro de la base, y es TYC-3152-58-1 (mag. 10,46).
Como referencia conocida, un poco más al Este podemos observar la doble STF 2691. (mag. 8,18 / 8,43; AP. 31º; Sep. 17”) que se encarga de proporcionar al conjunto una vista espléndida.
El asterismo se encuentra concretamente en las siguientes coordenadas:
AR: 20h 28m
DEC: +38º 22’
Durante el día siguiente me dediqué a investigar por internet y por varios libros que tengo el nombre por el que era conocido este asterismo, pero no fui capaz de encontrar ninguna referencia a este grupito estelar.
No me quise dar por vencido, y en el foro de la Asociación Astronómica Hubble publiqué un post preguntando si alguien conocía este asterismo, con un resultado negativo.
Al final, me decidí enviar un correo electrónico a Sue French, colaboradora habitual de la revista Sky & Telescope y autora del fantástico libro “Celestial Sampler”, y pedir su ayuda para localizar el nombre de este asterismo. Tras varios correos, muy amablemente, me confirmó que había consultado en todas sus fuentes disponibles y no había podido encontrar un nombre que identificase este grupo de estrellas.
Pues bien, en vista que mis esfuerzos por encontrar el nombre de este asterismo no dieron fruto, decidí que, al menos para mi, este asterismo siempre sería conocido como Oscar 1 (Alias, Pirámide bidimensional). A falta de descubrir un nuevo asteroide, una doble, una supernova, un exoplaneta... me conformo con bautizar un humilde asterismo, y cada vez que se lo enseñe a mis amigos y familiares les diré: “¿Queréis ver el asterismo Oscar 1?”...
Bromas aparte, quien tenga la oportunidad de echarle un vistazo, que lo haga. Pasará un rato muy agradable.
sábado, 13 de junio de 2009
M57 - Nebulosa planetaria en Lyra (Nebulosa del Anillo)
Cuando observamos la nebulosa del Anillo, M57, se da la paradoja que desde nuestro presente, estamos viendo el pasado y el futuro.
El pasado porque la luz que nos llega de esta nebulosa planetaria de la constelación de la Lyra, salió de su lugar de origen hace 1.140 años, es decir, cuando por aquí andábamos por el 869 D.C., año en que por ejemplo, los vikingos se encontraban en plena actividad por Europa...
Y el futuro, porque esta nube de gas es lo que le espera al final de sus días a nuestro querido Sol.
No deja de ser un poco estremecedor... pero volviendo al presente, la noche del 12 de junio, aprovechando un hueco entre las nubes bajas amenazadoras que al final me taparían todo el cielo, eché un vistazo a M57 con mi SC de 127mm y la dibujé a 125x:
Es realmente bonita. Pocas planetarias son tan asequibles a pequeños telescopios y tan espectaculares como M57. A 50x ya se aprecia perfectamente, y se puede disfrutar de su forma de anillo. Además, perfectamente enmarcada en un campo estelar verdaderamente rico.
Pero a la hora de dibujarla prefiero utilizar los 125x. Con estos aumentos la nebulosa ya tiene un tamaño considerable y todavía se ve acompañada por un buen número de estrellas.
Como mandan los manuales, pongo el filtro OIII, pero aunque resalta mucho más la nebulosa, me desaparecen todas las estrellas de su alrededor, ofreciendo una imagen que me sugiere algo “irreal”. Decido utilizar el filtro UHC y me permite alcanzar un acuerdo razonable entre el aumento de contraste de la nebulosa y el respeto a las estrellas más brillantes circundantes. Por cierto, de la estrella central ni rastro, aunque con el equipo de observación que tengo no haría falta comentarlo.
De todas maneras, es sensacional. Se puede apreciar una forma ovalada con un contorno más blancuzco y extenso que su zona central, más oscura y pequeña. Es necesario adaptar perfectamente la vista a la oscuridad y tener en cuenta que si se mira de reojo se puede apreciar mejor.
Vale la pena no forzar demasiado la vista. En un momento dado, empezaba a ver puntitos titilantes por todo el anillo. Es mejor observar unos segundos, retirar el ojo del ocular, y volver a la observación.
En definitiva, un objeto fácil y muy adecuado para enseñar a aquéllos que se acercan por primera vez a un telescopio.
El pasado porque la luz que nos llega de esta nebulosa planetaria de la constelación de la Lyra, salió de su lugar de origen hace 1.140 años, es decir, cuando por aquí andábamos por el 869 D.C., año en que por ejemplo, los vikingos se encontraban en plena actividad por Europa...
Y el futuro, porque esta nube de gas es lo que le espera al final de sus días a nuestro querido Sol.
No deja de ser un poco estremecedor... pero volviendo al presente, la noche del 12 de junio, aprovechando un hueco entre las nubes bajas amenazadoras que al final me taparían todo el cielo, eché un vistazo a M57 con mi SC de 127mm y la dibujé a 125x:
Es realmente bonita. Pocas planetarias son tan asequibles a pequeños telescopios y tan espectaculares como M57. A 50x ya se aprecia perfectamente, y se puede disfrutar de su forma de anillo. Además, perfectamente enmarcada en un campo estelar verdaderamente rico.
Pero a la hora de dibujarla prefiero utilizar los 125x. Con estos aumentos la nebulosa ya tiene un tamaño considerable y todavía se ve acompañada por un buen número de estrellas.
Como mandan los manuales, pongo el filtro OIII, pero aunque resalta mucho más la nebulosa, me desaparecen todas las estrellas de su alrededor, ofreciendo una imagen que me sugiere algo “irreal”. Decido utilizar el filtro UHC y me permite alcanzar un acuerdo razonable entre el aumento de contraste de la nebulosa y el respeto a las estrellas más brillantes circundantes. Por cierto, de la estrella central ni rastro, aunque con el equipo de observación que tengo no haría falta comentarlo.
De todas maneras, es sensacional. Se puede apreciar una forma ovalada con un contorno más blancuzco y extenso que su zona central, más oscura y pequeña. Es necesario adaptar perfectamente la vista a la oscuridad y tener en cuenta que si se mira de reojo se puede apreciar mejor.
Vale la pena no forzar demasiado la vista. En un momento dado, empezaba a ver puntitos titilantes por todo el anillo. Es mejor observar unos segundos, retirar el ojo del ocular, y volver a la observación.
En definitiva, un objeto fácil y muy adecuado para enseñar a aquéllos que se acercan por primera vez a un telescopio.
viernes, 12 de junio de 2009
M56 - Cúmulo Globular en Lyra
El 27 de junio de 2008 pude observar y dibujar M56, un cúmulo globular de la constelación de Lyra que se encuentra a 31.000 años luz y que brilla con una magnitud de 8,4. A través del SC Nexstar 5i (127mm) y el ocular de 18mm (69,44x ):
Presentó cierta dificultad. A pesar de las buenas condiciones de la noche (Seeing de 4/5) me vi afectado por la contaminación lumínica que sufro en mi lugar de observación habitual. El cúmulo no era demasiado grande, pero se apreciaba claramente, eso sí, sin demasiada definición. El brillo del núcleo no era muy espectacular, pero sí bastante homogéneo y se iba difuminando rápidamente hacia el exterior.
También comentar que me dió la sensación que la zona más cercana a TYC 2653-2788-1 (mag. 10,15), la estrella más brillante al lado del cúmulo, se veía como una concentración de estrellas más marcada que en el resto del contorno.
No descarto que desde un lugar más oscuro este cúmulo se pueda resolver con mi telescopio, ya que esa noche, llegué a percibir cierta “granulación”.
M56 se encuentra en un campo con muchas estrellas, pero no son excesivamente brillantes. Destacar la que he citado anteriormente que puede ser una buena referencia a la hora de situar el cúmulo desde lugares donde la contaminación lumínica cause estragos.
Y también mencionar una estrella de color rojizo situada un poco fuera del campo del ocular de 18mm que me proporcionó una vista espectacular cuando moví un poco el telescopio y la hice entrar en el campo de visión. Es HIP94630, una variable que se mueve alrededor de la magnitud 5,87.
Presentó cierta dificultad. A pesar de las buenas condiciones de la noche (Seeing de 4/5) me vi afectado por la contaminación lumínica que sufro en mi lugar de observación habitual. El cúmulo no era demasiado grande, pero se apreciaba claramente, eso sí, sin demasiada definición. El brillo del núcleo no era muy espectacular, pero sí bastante homogéneo y se iba difuminando rápidamente hacia el exterior.
También comentar que me dió la sensación que la zona más cercana a TYC 2653-2788-1 (mag. 10,15), la estrella más brillante al lado del cúmulo, se veía como una concentración de estrellas más marcada que en el resto del contorno.
No descarto que desde un lugar más oscuro este cúmulo se pueda resolver con mi telescopio, ya que esa noche, llegué a percibir cierta “granulación”.
M56 se encuentra en un campo con muchas estrellas, pero no son excesivamente brillantes. Destacar la que he citado anteriormente que puede ser una buena referencia a la hora de situar el cúmulo desde lugares donde la contaminación lumínica cause estragos.
Y también mencionar una estrella de color rojizo situada un poco fuera del campo del ocular de 18mm que me proporcionó una vista espectacular cuando moví un poco el telescopio y la hice entrar en el campo de visión. Es HIP94630, una variable que se mueve alrededor de la magnitud 5,87.
miércoles, 10 de junio de 2009
Fotografía planetaria de aficionado
Cuando a través de mi telescopio observo a duras penas, por ejemplo, una manchita oval blancuzca, que resulta ser M85, una galaxia de la constelación de Coma Berenices y leo que se encuentra a 60 millones de años luz de la Tierra, o lo que es lo mismo, que la luz que estoy viendo de esa galaxia hace 60 millones de años que salió de su origen... entonces, me doy cuenta que mi imaginación tiene serios problemas a la hora de intentar representar estas distancias.
Y esto, es una de las maravillas y atractivos que ofrece la astronomía para el aficionado: ver un pasado que nuestra condición humana, en condiciones normales, sería incapaz de contemplar.
Pero otro de los aspectos que me han impresionado profundamente, ha sido contemplar con mis propios ojos los planetas del Sistema Solar que tan sólo había podido ver en los libros.
Aquí dejo algunas de las fotos que he podido hacer hasta el momento con mi cámara Neximage, más una barlow x2 y mi telescopio Nexstar 5i:
Mercurio:
Planeta esquivo y poco vistoso. La recompensa es el hecho de cazarlo.
Venus:
Brillante. Muy interesante seguir sus fases.
Marte:
Sólo espectacular en sus oposiciones. Complicado para telescopios pequeños y medianos.
Júpiter:
Impresionante, tanto el planeta como el baile de sus satélites.
Saturno:
Nunca me canso de observarlo... esos anillos...
Urano:
En este caso, mejor la observación a pie de telescopio que la fotografía.
Neptuno: Lo tengo observado... pero no fotografiado. Es bueno que siempre queden retos...
20 de agosto de 2010 - Objetivo conseguido: Neptuno
En definitiva, no son las mejores fotografías que pueden verse por internet (como ejemplo se puede echar un vistazo a esta web de Damian Peach: http://www.damianpeach.com/barbados07.htm ), pero las he hecho yo, y he disfrutado, y disfruto, observando todos estos planetas que despiertan en mi un profundo sentimiento de admiración.
Y esto, es una de las maravillas y atractivos que ofrece la astronomía para el aficionado: ver un pasado que nuestra condición humana, en condiciones normales, sería incapaz de contemplar.
Pero otro de los aspectos que me han impresionado profundamente, ha sido contemplar con mis propios ojos los planetas del Sistema Solar que tan sólo había podido ver en los libros.
Aquí dejo algunas de las fotos que he podido hacer hasta el momento con mi cámara Neximage, más una barlow x2 y mi telescopio Nexstar 5i:
Mercurio:
Planeta esquivo y poco vistoso. La recompensa es el hecho de cazarlo.
Venus:
Brillante. Muy interesante seguir sus fases.
Marte:
Sólo espectacular en sus oposiciones. Complicado para telescopios pequeños y medianos.
Júpiter:
Impresionante, tanto el planeta como el baile de sus satélites.
Saturno:
Nunca me canso de observarlo... esos anillos...
Urano:
En este caso, mejor la observación a pie de telescopio que la fotografía.
Neptuno: Lo tengo observado... pero no fotografiado. Es bueno que siempre queden retos...
20 de agosto de 2010 - Objetivo conseguido: Neptuno
En definitiva, no son las mejores fotografías que pueden verse por internet (como ejemplo se puede echar un vistazo a esta web de Damian Peach: http://www.damianpeach.com/barbados07.htm ), pero las he hecho yo, y he disfrutado, y disfruto, observando todos estos planetas que despiertan en mi un profundo sentimiento de admiración.
sábado, 6 de junio de 2009
Eclipse Parcial de Sol: 3 de octubre de 2005
NUNCA DEBE OBSERVARSE DIRECTAMENTE EL SOL A SIMPLE VISTA O CON UNOS PRISMATICOS O TELESCOPIO. PUEDE CAUSAR UN DAÑO PERMANENTE E IRREVERSIBLE A LOS OJOS.
El 3 de octubre de 2005 fue una fecha que tenía señalada en mi agenda desde varios meses antes. Desde España iba a poder observarse un eclipse anular de Sol. La pena es que desde la zona de Barcelona tan solo lo vería parcial. Aún así, estaba muy ilusionado, y con los dedos cruzados para que no ocurriese ningún imprevisto que echara por tierra todas mis espectativas.
Pero llegó el día en cuestión y resultó ser un día magnífico. Era día laborable, pero pedí permiso para tomarme la mañana libre... permiso que conseguí sin demasiados problemas. Lo único fue que me tocó aguantar unas cuantas miradas de esas que dicen: “Vaya bicho raro, ha pedido una mañana de fiesta para ver un eclipse...”
Me levanté hacia las 7,00 h. y empecé a montar todo el tinglado de observación:
El invento, después de coger unas cuantas ideas de internet y otras propias quedó de esta manera. Cogí un trípode fotográfico y monté, sujetados con una goma elástico, unos prismáticos viejos Tasco 8x21 que tenía/tengo para llevar a los conciertos de grandes estadios. Encima le puse una cartulina para que su sombra proporcionase el suficiente contraste al Sol reflejado sobre un cartón con un papel blanco apoyado en una escalerilla que hacía de pantalla.
En definitiva, una buena manera de observar un eclipse solar sin jugarse la vista. Espero que para el 12 de agosto de 2026, fecha en que se producirá un eclipse total, pueda disponer de mejores medios... y me respete la salud... También anotar para ese momento, que sería interesante conseguir un termómetro. En el eclipse de 2005 noté que bajó un poco la temperatura y más tarde, por televisión comentaron que, efectivamente, llegó a bajar unos 4º C. De todas maneras, me hubiera gustado comprobarlo por mi mismo. También noté el cambio de luminosidad: estaba todo despejado, pero parecía como si estuviera nublado.
A las 9,45 hora local comenzó el eclipse, y me emocioné al ver que mi invento funcionaba y que podría ver como la Luna se interponía entre la Tierra y el Sol.
A las 11,03 hora local se produjo el máximo del eclipse, que en Barcelona estuvo alrededor del 85%, es decir, así:
La cosa fue evolucionando hasta las 12,30 hora local, en que se acabó el eclipse y todo volvió a la normalidad:
No fue nada científico, ni tan siquiera pudo considerarse casi ni medianamente amateur... pero disfruté muchísimo. No todos los días se puede ser testigo de un eclipse solar... aunque sea parcial.
martes, 2 de junio de 2009
Rima Aridaeus
En la sexta noche después de Luna Nueva, o cinco días después de Luna Llena, se puede observar con un telescopio mediano una formación lunar realmente espectacular: Rima Aridaeus.
Aquí dejo la foto que hice de la zona la noche del 30-5-2009 con la cámara DBK, la barlow x2 y mi telescopio SC de 127mm, y abajo la misma foto con el nombre de los accidentes más significativos:
Rima Aridaeus es una grieta que fue descubierta en 1792 por J.H. Schröter. Parece ser que se trata de una falla tectónica con una longitud de unos 220 km y de 4 a 5 km. de ancho. Curiosamente, el cráter del que toma el nombre, que se encuentra en un extremo de la grieta, pasa bastante desapercibido entre los demás cráteres de la zona. Tiene unos 11 km. de diámetro y tiene a su lado un cratercillo pegado, Aridaeus A.
Estoy un buen rato disfrutando de esta rima, a 125x ya se puede distinguir perfectamente, pero mejor forzar aumentos. En mi caso, puedo observarla a 250x con una calidad más que aceptable. A estos aumentos se presenta como una cicatriz que cruza por la superficie de la Luna.
Por la zona hay un buen número de cráteres de tamaño similar que ofrecen una vista de conjunto sensacional: Manners, Ritter C y B, Dionysius, Cayley, De Morgan, Whewell, Silberschlag...
Pero lo que más me ha impresionado ha sido el valle correspondiente al cráter Julius Caesar que desemboca en Sosigenes. Realmente espectacular.
No existen sombras que me llamen particularmente la atención... a excepción de una sombra con forma de pico alargado que se extiende al lado mismo del cráter Silberschlag. Impresionante.
Dejo aquí el dibujo que hice:
Una zona lunar muy atractiva que puede llegar a llenar toda una noche de observación.
Aquí dejo la foto que hice de la zona la noche del 30-5-2009 con la cámara DBK, la barlow x2 y mi telescopio SC de 127mm, y abajo la misma foto con el nombre de los accidentes más significativos:
Rima Aridaeus es una grieta que fue descubierta en 1792 por J.H. Schröter. Parece ser que se trata de una falla tectónica con una longitud de unos 220 km y de 4 a 5 km. de ancho. Curiosamente, el cráter del que toma el nombre, que se encuentra en un extremo de la grieta, pasa bastante desapercibido entre los demás cráteres de la zona. Tiene unos 11 km. de diámetro y tiene a su lado un cratercillo pegado, Aridaeus A.
Estoy un buen rato disfrutando de esta rima, a 125x ya se puede distinguir perfectamente, pero mejor forzar aumentos. En mi caso, puedo observarla a 250x con una calidad más que aceptable. A estos aumentos se presenta como una cicatriz que cruza por la superficie de la Luna.
Por la zona hay un buen número de cráteres de tamaño similar que ofrecen una vista de conjunto sensacional: Manners, Ritter C y B, Dionysius, Cayley, De Morgan, Whewell, Silberschlag...
Pero lo que más me ha impresionado ha sido el valle correspondiente al cráter Julius Caesar que desemboca en Sosigenes. Realmente espectacular.
No existen sombras que me llamen particularmente la atención... a excepción de una sombra con forma de pico alargado que se extiende al lado mismo del cráter Silberschlag. Impresionante.
Dejo aquí el dibujo que hice:
Una zona lunar muy atractiva que puede llegar a llenar toda una noche de observación.
lunes, 1 de junio de 2009
Asterismo Kemble 2 – o Little Queen – o W Cluster en Draco
La noche del 30 de mayo de 2009, con un seeing de 4/5 (siendo 5 óptimo), sin una nube en el cielo y con una Luna brillando al 48%, después de haber estado un buen rato disfrutando de nuestro satélite y de alguna que otra doble, recordé un asterismo que tenía anotado para observar: el llamado Kemble 2.
En la constelación de Draco, a 1,1º de Chi Draconis, más concretamente en AR: 18h 35m; Dec. +72º 23’, encontramos un grupo de una veintena de estrellas, cinco de las cuales brillan con magnitud de aproximadamente 7 y forman un asterismo muy peculiar, ya que recuerda en miniatura la constelación de Cassiopeia.
En el libro “Celestial Sampler” de Sue French, explica que este asterismo es conocido como Kemble 2, en honor al monje franciscano Lucian J. Kemble (1922-99) que hizo mención a este asterismo en un artículo que no llegó a publicar. Entre los aficionados a la astronomía tal vez sea más conocido el Kemble 1, que no es otro que la Cascada de Kemble, en Camelopardalis: una hilera de estrellas que van a desembocar al cúmulo abierto NGC 1502, pero esto ya es otro tema.
Kemble 2, como ocurre con muchos objetos astronómicos, recibe otros nombres, como puede ser “Little Queen” o “W Cluster”... a los que yo añadiría “M Cluster”, ya que al igual que sucede con Cassiopeia, según el momento en que se observe, se ve como una W o M.
Aquí dejo el dibujo que hice:
Es aconsejable utilizar pocos aumentos para disfrutar así de una buena perspectiva. El dibujo está hecho a 31x. Del conjunto destaca la estrella principal HIP91163, que brilla con una magnitud de 6,8 y tiene un espectro K3 III, lo que se traduce en un precioso color anaranjado que destaca sobre las otras.
Lo que más me ha gustado de este asterismo ha sido su similitud con Cassiopeia y el color de sus componentes. Estrellas que no tienen ninguna relación entre si exceptuando su proximidad de perspectiva.
Sea como sea, un bonito asterismo que bien merece una visita.
En la constelación de Draco, a 1,1º de Chi Draconis, más concretamente en AR: 18h 35m; Dec. +72º 23’, encontramos un grupo de una veintena de estrellas, cinco de las cuales brillan con magnitud de aproximadamente 7 y forman un asterismo muy peculiar, ya que recuerda en miniatura la constelación de Cassiopeia.
En el libro “Celestial Sampler” de Sue French, explica que este asterismo es conocido como Kemble 2, en honor al monje franciscano Lucian J. Kemble (1922-99) que hizo mención a este asterismo en un artículo que no llegó a publicar. Entre los aficionados a la astronomía tal vez sea más conocido el Kemble 1, que no es otro que la Cascada de Kemble, en Camelopardalis: una hilera de estrellas que van a desembocar al cúmulo abierto NGC 1502, pero esto ya es otro tema.
Kemble 2, como ocurre con muchos objetos astronómicos, recibe otros nombres, como puede ser “Little Queen” o “W Cluster”... a los que yo añadiría “M Cluster”, ya que al igual que sucede con Cassiopeia, según el momento en que se observe, se ve como una W o M.
Aquí dejo el dibujo que hice:
Es aconsejable utilizar pocos aumentos para disfrutar así de una buena perspectiva. El dibujo está hecho a 31x. Del conjunto destaca la estrella principal HIP91163, que brilla con una magnitud de 6,8 y tiene un espectro K3 III, lo que se traduce en un precioso color anaranjado que destaca sobre las otras.
Lo que más me ha gustado de este asterismo ha sido su similitud con Cassiopeia y el color de sus componentes. Estrellas que no tienen ninguna relación entre si exceptuando su proximidad de perspectiva.
Sea como sea, un bonito asterismo que bien merece una visita.